Lactancia Materna en el verano - 5 TIPS

La lactancia es un acto tan puro que conecta a la mamá con su bebe pero. ¿Qué pasa cuándo ese acto se ve "afectado" por el verano?.

Llevo 3 veranos de Lactancia y ¡Vaya que sí es todo un tema!, sin embargo es lo mejor y lo más práctico del mundo.

Mi primer verano de teta fue cuando Josefina apenas había nacido, el calor era infernal y mis tetas no sólo eran proveedoras de fuente de vida sino también de un volcán en erupción, el derroche de sudor y bochornos daban la hora y la producción de leche "como vaca" aún no se daba y para poder lograr esa producción, Josefina debía vivir prácticamente en mi pecho. ¿Te imaginas cuán pegajosas estábamos?...

Si darás a luz por estas fechas, te recomiendo tomar en cuenta que la lactancia no será tan fácil y necesitarás mucha fuerza de voluntad y un enorme ventilador para cuando estés sola y tu bebé duerma la siesta y también necesitaras muuucha agua.

Si tienes un bebé de 3 meses y quieres llevar un verano playero con el/la, debes hidratarte mucho.
Es más fácil cuando el bebé tiene una alimentación complementaria (desde los 6 meses ) ya que a esta edad, puedes estar segura que tu bebé tiene horas establecidas para pedir tetita (ellos acomodan su horario de lactancia con el tiempo).

Después de un año de haber parido, el verano nos cogió muy intenso y nuestras salidas a la playa (por todo lo acontecido el verano pasado) ya no existían. Sin embargo las pocas veces que fuimos, el dar de lactar fue lo mejor porque el alivio de no llevar Fórmula a la orilla del mar o correr para preparar una toma y exponer el biberón al sol, no era la mejor aternativa porque aparte si Josefina no quería el biberón, sin duda era plata echada al agua porque no la tomaba y se echaba a perder tan pronto la preparaba. Definitivamente con la tetita bastó y sobró, claro que también llevamos alimentos como frutas y snacks para bebés.


Éste es mi último verano dando teta. Me invade la nostalgia el sólo hecho de pensarlo y a pesar de todo pienso disfrutar al máximo lo que me queda de esta etapa.

Sin más preámbulos, voy a dejarte 5 CONSEJOS para sobrellevar de la manera más cómoda la lactancia en el verano y aplica para la tetita en todas las edades:

1. HIDRÁTATE MUCHO. Si bien es cierto, en casa debes hidratarte mientras das de lactar, el verano y la playa obligan al cuerpo de tetita a hidratarse mucho más.

2. SI TE EXTRAES LA LECHE, hazlo en un lugar fresco. La leche sin refrigerar en cualquier época del año puede durar hasta 2 horas, en el verano la descomposición de esta se acelera y debes almacenarla y guardarla en la refri una vez extraída lo más pronto posible.

3. SI LA TETA ES A DEMANDA, QUE SIGA SIENDO A DEMANDA. El verano y la playa no tienen por qué cambiar el horario y la disposición de la tetita para el bebé.

4. EVITA LA INSOLACIÓN, recuerda que cualquier tipo de malestar afecta esa conexión tan maravillosa con el bebé.

5. EL SOL NO AFECTA LA LECHE DENTRO DE NUESTROS PECHOS. Nuestras tetitas son una fábrica de leche y producen leche al instante cuando el bebé empieza a lactar. No somos un envase que expuesto al sol se malogra ¡Para nada!. Así que si te gusta broncearte ¡Hazlo!, ojo que todo en exceso es dañino aunque esa regla no aplica para la tetita.

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